2 febrero 2004
Madrid-Paris
El Tribunal de Primera Instancia de la localidad francesa de Béziers ha desestimado la demanda impuesta por la familia de Madame Berger considerando que la falta de información que alegaban los demandantes no puede ser imputada a Seita.
La familia de Madame Berger, fallecida de un cáncer que ella achacaba a su adicción al tabaco, reclamaba 230.000 euros por daños y perjuicios y 1.525 euros de pensión mensual para sus tres hijos.
El Tribunal ha señalado que, hasta 1976, Seita no podía, por propia iniciativa, mostrar mensajes sanitarios en los paquetes de cigarrillos. Por tanto no se le puede reprochar el haber faltado a su obligación de informar ya que no era de su competencia.
Asimismo, el Tribunal ha estimado que no existía vínculo alguno de causalidad entre las condiciones de información después de 1976 y el daño causado a Madame Berger.
Esta decisión está en línea con otras sentencias como la fallada por el Tribunal de Casación en el caso Gourlain (noviembre 2003) en las que se hace un análisis preciso del estricto marco reglamentario y jurídico por el que se regula la industria del tabaco. Altadis recuerda que el consumo del tabaco es una elección personal ejercida con todo conocimiento de causa.
Hasta la fecha, Altadis ha ganado doce juicios ligados al tabaco en Francia, Polonia y España.
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